Hoy es viernes, glorioso día de estreno. Hoy, entre otras cosas, se estrena "El intercambio", según la publicidad, "otra obra maestra de Clint Eastwood". El estreno llego mientras en Estados Unidos ya está a punto el siguiente film de Eastwood, "Gran Torino". Atentos a la sinopsis porque no tiene desperdicio. Eastwood es Walt Kowalski, un ex combatiente de la guerra de Corea que ahora jubilado, se dedica a que llegue su momento en una apacible zona residencial, pero resulta que su hogar se ha visto invadida por multitud de inmigrantes latinos, afroamericanos y hmong (nativos del sur de China y del sudeste asiático) que han convertido el lugar en un polvorín a punto de estallar. Kowalski soporta como puede la situación hasta que unos jóvenes tratan de robarle su flamante coche, precisamente un Ford Gran Torino. Ni corto ni perezoso, e imagino que llevado por otras cuestiones porque si no el asunto tendría bemoles, Kowalski coge su fusil M-1 que se trajo como souvenir de Corea y se toma la justicia por su mano, tiro aquí, tiro allá.
Como se puede comprobar, el asunto muy bien podría tratarse de una secuela otoñal del popular Harry Callahan, el celebérrimo protagonista de la serie Harry el sucio, puesto que el tipo de reacción de Kowalski, esa de echar mano a un arma y ponerse a pegar tiros, no desencaja demasiado con el poseedor de la Magnun-44 más famosa del mundo. De hecho, en un principio, antes de conocer la sinopsis del film, se especuló que "Gran Torino" fuera una secuela sorpresa de la saga "Harry el sucio".
Llama la atención que dejados atrás la era Reagan y pese a la forzada resurrección de John Rambo, una película con una temática tan discutible que algunos incluso han acusado directamente de fascista y un pelín xenófoba, sea recibida sin problema alguno tanto por Estados Unidos y seguro que en Europa, tampoco provoca ningún trauma. De hecho, se ha llegado a especular que no sería extraño que Eastwood fuera nominado al Oscar al mejor actor e incluso se lo llevara, algo que por otro lado tiene mucho sentido viniendo de un hombre que se ha reinventado en plena era Burckheimer (productor de "CSI" y "Piratas del Caribe", entre otras) y que ha dejado boquiabierto a más de uno con asombrosas producciones inusualmente maduras y exitosas en tiempos de puñetazos visuales forjados en la generación Mtv. Además, a Eastwood el único Oscar que le falta para poder morir tranquilo sería el de mejor actor (que nunca ha conseguido) de modo que un Oscar, con aroma a reconocimiento a toda una carrera (como se ha dado en más de una ocasión) no sería nada descabellado.
Bueno, pues ya veremos que pasa con "Gran Torino". Viniendo de un hombre como Eastwood, seguramente nada malo. El director -que por cierto anunció que con está película dejaría la interpretación con lo cual, más puntos favor para llevarse la preciada estatuilla dorada- de "Sin perdón" sabe como rodar una película como los clásicos, con un tempo inusualmente contenido pero también, asombrosamente intenso. Poco se le puede reprochar a un cineasta como Eastwood desde hace años y ya es, con todos los derechos, una leyenda viva del cine. El día que nos deje Eastwood, el cine se quedará un poco más huérfano. Esperemos que ese día, tarde en llegar.
Como se puede comprobar, el asunto muy bien podría tratarse de una secuela otoñal del popular Harry Callahan, el celebérrimo protagonista de la serie Harry el sucio, puesto que el tipo de reacción de Kowalski, esa de echar mano a un arma y ponerse a pegar tiros, no desencaja demasiado con el poseedor de la Magnun-44 más famosa del mundo. De hecho, en un principio, antes de conocer la sinopsis del film, se especuló que "Gran Torino" fuera una secuela sorpresa de la saga "Harry el sucio".
Llama la atención que dejados atrás la era Reagan y pese a la forzada resurrección de John Rambo, una película con una temática tan discutible que algunos incluso han acusado directamente de fascista y un pelín xenófoba, sea recibida sin problema alguno tanto por Estados Unidos y seguro que en Europa, tampoco provoca ningún trauma. De hecho, se ha llegado a especular que no sería extraño que Eastwood fuera nominado al Oscar al mejor actor e incluso se lo llevara, algo que por otro lado tiene mucho sentido viniendo de un hombre que se ha reinventado en plena era Burckheimer (productor de "CSI" y "Piratas del Caribe", entre otras) y que ha dejado boquiabierto a más de uno con asombrosas producciones inusualmente maduras y exitosas en tiempos de puñetazos visuales forjados en la generación Mtv. Además, a Eastwood el único Oscar que le falta para poder morir tranquilo sería el de mejor actor (que nunca ha conseguido) de modo que un Oscar, con aroma a reconocimiento a toda una carrera (como se ha dado en más de una ocasión) no sería nada descabellado.
Bueno, pues ya veremos que pasa con "Gran Torino". Viniendo de un hombre como Eastwood, seguramente nada malo. El director -que por cierto anunció que con está película dejaría la interpretación con lo cual, más puntos favor para llevarse la preciada estatuilla dorada- de "Sin perdón" sabe como rodar una película como los clásicos, con un tempo inusualmente contenido pero también, asombrosamente intenso. Poco se le puede reprochar a un cineasta como Eastwood desde hace años y ya es, con todos los derechos, una leyenda viva del cine. El día que nos deje Eastwood, el cine se quedará un poco más huérfano. Esperemos que ese día, tarde en llegar.
8 comentarios:
Tengo clarito que voy a ver las dos pelis.
Me encanta Clint. Es el puto amo.
Un saludete
Y usted que lo diga, y usted que lo diga...
Perdoname, querido Ramon, que por enesima vez te corrija... pero el argumento de "Gran Torino" no es exactamente como lo cuentas.
El personaje de Eastwood no agarra su fusil y se toma la justicia por su mano... EN ABSOLUTO.
Un vecino adolescente, tratando de superar las pruebas de ingreso en una pandilla juvenil, intenta robarle su preciado vehículo, pero no lo consigue.
La familia del muchacho, cuando se entera, le aplica su rígido código moral al chaval y le obligan a congraciarse con el agraviado Eastwood pasando a estar "a su servicio", estableciendose entra ambos una relación semejante a la del sr. Miyagi de "Karate Kid", vamos, que "dal sela, pulil sela" al final consigue aproximar las contrapuestas personalidades de ambos personajes hasta llegar a un punto de acuerdo en medio de un ambiente racial semejante al de "Boyz in the ´hood" de John Singleton con una redención final estilo "American History X".
Efectivamente corría al principio el rumor de que "Gran Torino" era una historia que podia considerarse como una secuela de las pelisd e Harry el Sucio, pero todo era fruto del malentendido de considerar que por el mero hecho de que el personaje de Eastwood era como es, al final cogia su fusil y se ponia a impartir justicia... y creeme que no es asi en absoluto.
Habra escenas de violencia y peleas, por supuesto, pero el personaje de Eastwood no es un Harry el Sucio, sino que mas bien al contrario el trasfondo de la pelicula es la convivencia pacifica entre diferentes grupos sociales y sociales.
Vamos, una alianza de civilizaciones de las que le gustan a Zapatero.
Yo juraría a ver leído que el señor Eastwood cogí su fusil y montaba una buena, en todo caso ya veremos y si, tiene más sentido lo que tu dices, aunque también he leido ciertas críticas que tachaban al film de ser inexplicablmenete fascistoide para los tiempos que corren. Ya veremos ya..., de todos modos es una peli de Eastwood y eso lo perdona todo.
Tengo muchas esperanzas puestas en "El intercambio" y respecto a "Gran Torino" independientemente de su argumento también la veré, Eastwood cada día me sorprende más (positivamente hablando).
Lo que es prodigioso de Eastwood es que, como Pixar, se supera con cada trabajo.
Eso es lo que diferencia al genio del resto de los creadores.
Ayer fui al cine a ver "EL intercambio" y debo decir que me encantó, ha sido una de las mejores películas que he visto este año. Muy recomendable.
Saludos.
Tomamos buena nota Miguel, aunque a mi lo único que me chirría un poco es la Angelina Jolie..., es algo así como Nicole Kidman, no me la termino de creer allí donde la ponen, es tan perfecta, tan cuidada, tan, tan,... y encima, esos labios... En fin..., le veré igualmete, Eastwood es mucho Eastwood.
Publicar un comentario