A mi novia, ahora mi mujer, no le gusta en absoluto la música de cine, lo cual complica un poco, no crean, mis momentos para podes escuchar música, sin embargo, si le gusta Joe Hisaishi. El asunto tiene su gracia, porque Joe Hisaishi es uno de los compositores más melódicos y sensibles que habitan el actual panorama mundial. Su verano de Kikujiro es simple y llanamente genial, una melodía a piano tan sencilla como pegadiza, habita una banda sonora impecable. Sus colaboraciones con el cine de Takeshi Kitano, no suelen tener desperdicio alguno. Y sus trabajos para el cine de animación de Hayao Miyazaki son absolutamente arrebatadores, quizá, con "La princesa Mononoke" a la cabeza.
El compositor, que el próximo mes de diciembre cumplirá los 49 años, en plena madurez creativa, es probablemente el músico más solicitado de Japón. Uno de sus últimos trabajos ha sido para la película nipona "Okuribito", traducida en nuestro país como "Despedidas", del director japonés Yojiro Takita, responsable de la que fue la auténtica sorpresa de los últimas Oscar al hacerse con la estatuilla al mejor de film de habla no inglesa. La película, que yo sepa, aún no se ha estrenado en nuestras salas, y si lo llega a hacer, sabe Dios si legará a las santas salas de esta, mi reverenciada Región, en fin...
El caso, es que aún sin haber visto la película, y sabiendo que el film trata sobre un joven que encuentra trabajo en una funeraria amortajando cadáveres, la música compuesta por Hisaishi desvela, que además de una honda sensibilidad, el largometraje de Takita debe de estar empapado de optimismo. Y todo, amortajando muertos, si. Desde luego, "Despedidas" no es "El verano de Kikujiro", en el sentido de que no tiene esa melodía tan pegadiza y de una forma tan insistente, pero probablemente eso no fuera lo que se estaba buscando para el film de Takita. "Despedidas" es otra cosa bien distinta, pero también bellísima. Su leit motiv es total y absolutamente arrebatador, menos fácil que el de Kikujro, pero igualmente bello.
De este modo, lo cierto es que Hisaishi no ha hecho más que demostrar que está en pleno momento álgido y que es ahora cuando todavía, puede llegar a superarse, en cuyo momento, francamente, no se va que va a pasar, porque se me hace imposible imaginar melodías más emotivas y sensibles que las que ya ha compuesto el músico japonés. Pero son precisamente partituras como la de "Despedidas", las que mejor ponen en evidencia el talento de un músico que todavía sigue creciendo y que lo demuestra con cada nuevo trabajo. Que no tiene miedo a experimentar y que además sabe como ofrecer un trabajo aparentemente sencillo pero esencialmente complejo y siempre, bello.
Para los que no se hayan convencido, aquí os dejo el leit motiv y ya os adelanto en cualquier caso que si bien, se trata del tema principal de la BSO, no es la variación más arrebatadora, para eso, hay que esperar al penúltimo tema. En todo caso, lo que si está claro es que la película, habrá que verla si o si.
3 comentarios:
Buenas
Película muy recomendable. Cuando la vi no me extraño en absoluto el que se llevara el Oscar. Si podéis, ir a verla con alguien que conozca la cultura japonesa, porque hay algunos detalles que si no, se os pueden escapar (Ej: la escenas del onsen) o baño tradicional japonés. Allí lo de irse a bañar a un sitio público es muy normal).
Un saludo
La canción es preciosa, una genialidad.
Como dije, esa película la veré si o si...
Y me alegro que te gustara el tema de Hisaishi Miguel.
Un saludo.
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