Aunque pueda parecer mentira, viniendo de un fan convulsivo del cine de terror como yo, siempre he sido muy miedoso. Mis padres se percataron pronto que al ver una película como "Gremlins", aquella noche no pegaba ojo acosado por pesadillas. De modo que no fue hasta bien entrado en años, cuando empecé a ver películas de terror. Recuerdo que la primera que vi fue "El resplandor" pero bueno, a lo que iba. Una vez había superado el trauma del cine de terror y ya me había atrevido a zambullirme en el oscuro mundo de horror, no recuerdo cómo ni por qué, me topé con una peliculilla titulada "House", aquí en España, con el subtítulo de "Una casa alucinante". La cinta explotaba el asunto de las casas encantadas pero tenía algo diferente más allá de ser una mera cinta de terror. Tenía humor.
Yo recuerdo que (y me van a perdonar la expresión) me acojonaba ver deambular el fantasma de la tía abuela del protagonista, ver como las puertas se cerraban o escuchar la aterradora voz de su hijo perdido en no se sabe qué dimensión. Pero en cuanto aparecían los monstruos, uno se reía, se lo tomaba a coña. Además, la película venía interpretada por tres actores asociados a la comedia por aquellos años (hablamos de 1986). William Katt, para un chaval como yo en aquellos años, más conocido por su papel en "El gran héroe americano" (¡cómo disfrutaba yo con esa serie!), George Wendt, también más conocido por su papel de Norm en la serie "Cheers" y Richard Moll, en un inusual papel para un actor que también era más conocido por su interpretación de Bull en la serie "Juzgado de guardia".
El caso es que ante los evidentes momentos de terror, yo me sentía relajado viendo aquella película. Me lo podía permitir, porque era un horror divertido. Además recuerdo que por aquellos años empezaban a emitirse los hoy conocidos como Making off, que por aquel entonces eran verdaderos cómo se hizo, y no los pseudo-documentales de ahora, que no son más que promociónales encubiertos de falso documental en los que no se cuentan nada de nada. Pues bien, recuerdo que en mi recién adquirida pasión por el cine, grababa en vídeo esos cómo se hizo y si hubo uno que vi mil veces, ese fue el cómo se hizo de "House". Con lo cual, mi gusto por esta película se incrementó porque disfrutaba como un enano viendo qué bien quedaban los efectos especiales que yo ya había visto como se habían hecho (recuerdo que por esa época e influido por este cómo se hizo pillé varios objetos de mi habitación y los colgué de finos hilos a contra luz, de tal forma que cuando entrabas a la habitación no se veían los hilos, sólo cosas flotando. El susto de mi madre el primer día que entró fue para tenerlo en cuenta...).
Uno, que empezaba a hacerse, tal vez demasiadas preguntas sobre esto del cine, descubrió no mucho después que el director de tan entretenido divertimento del horror era Steve Miner, antes productor de "Aquella casa a la izquierda" y "Viernes 13" entre otras y director de "Viernes 13. 2ª parte" y "Viernes 13. 3ª parte", cosa fina... Gracias al buen rato que pasé viendo "House" le hice cierto seguimiento a Miner, pero nada interesante que ofrecer la verdad. Filmó una desigual "Warlock. El brujo" hasta que se vendió a Hollywood por un vaso etrusco al servicio de Mel Gibson en la ya olvidada "Eternamente joven". Desde entonces, mucha televisión (ha dirigido algún episodio de "Smallville") y poca chicha. Parecía que Miner iba a volver a hacer de las suyas cuando le ofrecieron dirigir "Halloween H20". Pero bueno..., la película tiene pase pero nada que festejar la verdad... También descubrí poco después, que la historia de "House" venía firmada por Fred Deker, un simpático director y guionista de cosas tan insustanciales como entretenidas como "Robocop 3", "El terror llama a tu puerta" y "Una pandilla alucinante".
En cualquier caso el éxito de "House" se tuvo en cuenta. Ganó algunos premios en festivales de cine fantástico y fue aplaudida en otros tantos. De modo que pronto se generó una secuela "House II" (1987), que algún listo subtituló aquí "Aún más alucinante". En realidad, lo que era alucinante de aquella película era su guión, disparatado hasta la médula, tanto, que no podía resultar otra cosa que no fuera divertido. Esta secuela vino escrita y dirigida por el guionista de la primera, Ethan Wiley, que años después dirigiría "Los chicos del maíz V"... "House II" ya no da miedo, ninguno, sus elementos de horror son anecdóticos, aquí lo que prima es el disparate. Desde luego, es una película alucinante...
"House II" no respondió tan bien en taquilla, pero debió de hacer dinero en los videoclubes porque en 1989 se lanzó una segunda secuela "House III", aunque su título original era "The Horror Show", señal de que los vínculos con el film original ya eran pura casualidad. Dirigida por James Isaac (tiempo después responsable de otra hilarante historia, "Jaso X"), "House III" ya casi no tiene humor y si mucha sangre. La película es muy mediocre, no hay por donde cogerla y no merecer mayor consideraciones.
En cualquier caso, como dijo un día El Chache, estas son cosas de completismo cinematógrafo del horror americano de serie B. Las tres películas se acaban de editar en DVD. Si hay algún valiente, no están nada mal de precio... Yo me lo estoy pensando.
5 comentarios:
Como mola esta peli. Me encanta.
Tambien la vi jovencito. Una genial mezcla de terror y humor. Y como mola el esqueleto de Richard Moll.
Un saludete
El cine de terror es, normalmente, el más tardío en visionar por casi todos. A mí también me entraba el canguelo. Bueno, canguelo cuando ví "Terror en Amytiville". Muchas veces influía e influye también el lugar donde te encontraras o donde te encuentres cuando ves esas películas...
Lo de "El Resplandor" y esos pasillos interminables es para "echarle de comer aparte".
Ansío el Maratón 09, y que nos recomiendes alguna peli de estas terroríficas, pero al tiempo con su dosis de cachondeo (o una de la Hammer, o ambas) Por el Maratón dentro de siete meses... habrá que moverse.
Bocha, me pasaré por tu blog, ahora ando un poco liado. Por cierto, esa foto da un poco de yu-yu, eh?
Un saludo.
joder, mi pelicula de la infancia. No sé la de veces que la ví de pequeño ,con la mano en la cara (mirando a través de los dedos...que estampa) con lo que le tengo un cariño muy especial(aunque sus valores cinematográficos distan mucho de ser los de una joya del cine) y la edición en dvd no ha hecho sino despertar aquellos (buenos)recuerdos delante del televisor repitiendo aquello de "¿dónde está tu hijo, Roger?...está muerto".
Lo que es una pena es que la edición en dvd en españa no traiga ni un sólo extra (malditos de Manga Films).
Si David, es una pena que la ediciñon en dvd de House no tenga un sólo extra, una pena, en serio. Creo que esta pelicula la hemos disfrutado más de uno con la mano en la cara y dentro de su mediocridad narrativa, lo cierto es que el film creo que funciona a la perfección, de modo que nada que objetar.
Saludillos.
Publicar un comentario